El domingo, Estados Unidos destacó su papel en la colaboración con Israel para evitar un ataque aéreo de Irán, mientras el presidente Joe Biden convocaba a los líderes del Grupo de los Siete para coordinar una respuesta y evitar una escalada regional.
El ataque planeado por Irán, que involucró docenas de drones y misiles dirigidos a Israel, fue neutralizado en gran medida gracias a la colaboración entre Estados Unidos e Israel. A pesar de la alta tasa de interceptaciones, las autoridades estadounidenses señalaron que la intención de Irán era causar daño significativo y provocar una escalada incontrolable en la región.
Biden comunicó a Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel, que Washington no participaría en ninguna acción ofensiva contra Irán, instando a la contención y la consideración estratégica para evitar una escalada. La presión para moderar la respuesta de Israel refleja los esfuerzos de Estados Unidos por limitar la guerra en curso de Israel contra Hamas en Gaza y proteger a los civiles en el territorio.
Estados Unidos, junto con sus aliados, se preparó durante días para el ataque planeado por Irán. Aviones estadounidenses y destructores fueron desplegados en la región para apoyar la defensa de Israel contra los drones y misiles de Irán. La coordinación en tiempo real desde la Sala de Situación de la Casa Blanca permitió una respuesta efectiva y la neutralización de la amenaza.
La respuesta conjunta de Estados Unidos e Israel destaca el compromiso firme de Estados Unidos con la defensa de Israel. Además, durante una videoconferencia del G7, los líderes condenaron enérgicamente el ataque de Irán y expresaron total solidaridad y apoyo a Israel.
Postura del Grupo de los Siete
El grupo de democracias avanzadas (Estados Unidos, Italia, Japón, Alemania, Francia, Gran Bretaña y Canadá) también dijo que Irán, “con sus acciones, ha dado un paso más hacia la desestabilización de la región y corre el riesgo de provocar una escalada regional incontrolable” y señalaron que sus naciones “están listas para tomar más medidas ahora y en respuesta a nuevas iniciativas desestabilizadoras”.
Aunque la situación parece haberse calmado por el momento, tanto Estados Unidos como Israel están preparados para tomar medidas adicionales si es necesario. La colaboración entre ambas naciones y sus aliados en la región es fundamental para contrarrestar las amenazas planteadas por Irán y mantener la estabilidad en el Medio Oriente.
Redacción de: Karen Rodríguez A.
