Israel amplió su ataque militar hacia el norte de la Franja de Gaza mientras la ONU y el personal médico expresan temores por los ataques aéreos que impactaron cerca de los hospitales, donde miles de palestinos han buscado refugio junto a miles de heridos.
El Ejército de Israel asegura que eliminó a decenas de combatientes de Hamás durante la noche y atacó objetivos en el norte de Gaza por la ampliación de sus operaciones terrestres en el enclave.
El número de muertos palestinos en la guerra entre Israel y Hamas supera los 8.000, según el Ministerio de Salud de Gaza. En la ocupada Cisjordania, más de 110 palestinos han muerto a causa de la violencia y las incursiones israelíes. Además, los trabajadores humanitarios dijeron que el mayor convoy de ayuda humanitaria que llegó a Gaza aún estaba muy por debajo de las necesidades actuales.
Por su parte, el jefe de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos adviertió que “un alto el fuego humanitario inmediato se ha convertido en una cuestión de vida o muerte para millones”, subrayando que “de ello depende el presente y el futuro de palestinos e israelíes”.
El comisionado general de la agencia conocida como UNRWA también dijo que 64 miembros de su personal han sido asesinados en poco más de tres semanas.
Pese a los pedidos internacionales, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu dijo que no aceptaría un alto el fuego, señalando que esta acción equivaldría a “rendirse a Hamás, rendirse al terrorismo, rendirse a la barbarie. Eso no sucederá”. Así mismo, añadió que Hamás era responsable del alto número de muertos en Gaza y acusó al grupo de utilizar a civiles como escudos humanos.
Redacción de: Karen Rodríguez
