El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, informó que ha tomado una decisión respecto a la respuesta de su país tras el ataque con dron ocurrido el 28 de enero en una base militar en Jordania, que resultó en la muerte de tres soldados estadounidenses y dejó aproximadamente cuarenta heridos entre las fuerzas desplegadas en la región.
Biden, en declaraciones a los periodistas, confirmó que Irán es señalado como responsable del ataque debido a su presunto suministro de armas a los perpetradores. El mandatario, sin entrar en detalles sobre la naturaleza específica de la respuesta, destacó la necesidad de mantener un delicado equilibrio para evitar una escalada de tensiones en la región.
“Los hago responsables, en el sentido de que están suministrando armas a las personas que lo cometieron”, afirmó Biden, subrayando su postura ante la prensa. La respuesta de Estados Unidos, según expertos, podría estar dirigida a bases militares iraníes en terceros países, evitando así ataques directos al territorio de la República Islámica.
Qué sucedió
El ataque con dron en la base militar jordana representó el atentado más grave contra la presencia militar estadounidense en la región desde el inicio del conflicto entre Hamás e Israel. Tres soldados estadounidenses perdieron la vida en el incidente, generando la necesidad de una respuesta proporcionada por parte de Estados Unidos.
Biden enfatizó que su objetivo no es desencadenar una guerra más amplia en Medio Oriente y subrayó que la respuesta planificada busca evitar una escalada de conflictos en una región ya afectada por tensiones y disputas. Con esta postura, el presidente refleja la posición oficial del gobierno estadounidense de no buscar un conflicto a gran escala con Irán.
Redacción de: Karen Rodríguez A.
