La Iglesia Anglicana de Santa Ana, un icónico recinto nacional ubicado en la región del Pequeño Portugal, en Toronto, fue devastado en la mañana del domingo por un incendio nivel cuatro. Hasta el momento se desconoce el motivo del siniestro provocado por el fuego.
Poco antes de las nueve de la mañana, mientras se preparaba para ir a la iglesia, el párroco responsable durante los últimos tres años, Don Beyers, recibió el mensaje de un feligrés avisando sobre la presencia de humo e inmediatamente los bomberos fueron alertados.
La policía de Toronto confirmó que a pesar de la alarmante situación, no se reportaron heridos y que los daños fueron apenas materiales. Por su parte algunos residentes narraron que había mucho humo en el local y que vieron compungidos cómo se destruía la propiedad.
El trabajo de los bomberos
En un primer momento, los bomberos trabajaron para detener la propagación del incendio, dijo Jim Jessop, subdirector de los Servicios de Bomberos de Toronto. Luego las propiedades vecinas fueron evacuadas por precaución y se estableció una zona de seguridad, declaró.
El edificio quedó completamente destruido, así como todos los objetos que se encontraban en su interior. El calor de las llamas, el volumen de agua utilizado para combatir el fuego y la propia antigüedad del inmueble podrían producir más derrumbes de la estructura, dijo.
Algunas repercusiones del incendio
La alcaldesa de Toronto, Olivia Chow, destacó el trabajo comunitario realizado por los feligreses de esa institución. La representante de ese distrito, la diputada provincial Marit Stiles, dijo que era una pérdida irreparable para la comunidad y prometió su reconstrucción.
Por su parte, la concejala representante de esa circunscripción, Alejandra Bravo, reconoció que dicha iglesia era un espacio que siempre ha brindado amor, apoyo, hogar y que ha unido a las personas de la comunidad, atendiendo las necesidades de los frecuentadores.
La Iglesia Santa Ana, fue construida entre 1907 y 1908, el año 1996 fue designada patrimonio nacional por la municipalidad de Toronto. El párroco Beyers, comentó que junto a otras notables obras, la iglesia albergaba la única obra de arte religiosa realizada por el Grupo de los Siete. Contó también, que en el local se impartían clases de música y arte, se ofrecían cenas comunitarias y muchas otras importantes actividades para la comunidad.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporte
