Las autoridades venecianas están investigando después de que apareciera una mancha de agua verde fluorescente en el famoso Gran Canal el domingo por la mañana.
“Esta mañana apareció una mancha de líquido verde fosforescente en el Gran Canal de Venecia, según informaron algunos vecinos cerca del Puente de Rialto. El prefecto ha convocado una reunión urgente con la policía para investigar el origen del líquido”, escribió en Twitter el presidente regional de Veneto, Luca Zaia.
Según declaraciones de las autoridades, se tomaron muestras de agua de forma inmediata y se revisaron las cintas de vigilancia de circuito cerrado de televisión. Además, se levantó información a través de preguntas realizadas a los gondoleros locales y a los conductores de botes. Posterior, se convocó a una reunión de emergencia para investigar la causa del agua verde, señalando que ningún grupo ambientalista se había atribuido la responsabilidad.
La mancha verde se notó por primera vez alrededor de las 9:30 a. m. CET (3:30 a. m. ET) y creció lentamente, según múltiples imágenes publicadas en las redes sociales, que mostraban góndolas, taxis acuáticos y botes de autobús acuático rozando la sustancia esmeralda.
El concejal de la ciudad, Andrea Pegoraro, culpó de inmediato a los activistas ambientales que han estado atacando sitios del patrimonio cultural italiano en los últimos meses. El fin de semana pasado, el grupo Ultima Generazione, que vertió carbón en la Fontana de Trevi en Roma; sin embargo, la organización negó su participación.
Esta no es la primera vez que el Gran Canal de Venecia experimenta una alteración de color. En 1968, el artista argentino Nicolás García Uriburu tiñó las aguas del canal de verde con un tinte fluorescente llamado Fluoresceína, durante la Bienal de Venecia anual. El movimiento fue diseñado para llamar la atención sobre cuestiones ecológicas y la relación entre la naturaleza y la civilización.
Redacción de: Karen Rodríguez