El secretario general de la INU, António Gutierrez se encuentra de visita en Moscú donde se reunió primero con el canciller Sergei Lavrov y luego con el presidente Vladimir Putin. La idea central del diplomático portugués es analizar la situación en Ucrania y proponer un alto al fuego en la región.
Antes de llegar a la capital rusa, Guterres había reconocido que su organización y el gobierno ruso tienen una interpretación muy diferente de lo que está sucediendo en Ucrania, sin embargo, añadió que eso no impide que se pueda tener un diálogo, que podría ayudar a reducir el sufrimiento de las personas involucradas en el conflicto.
Tras su encuentro con el canciller ruso, Guterres dijo que Naciones Unidas está dispuesta a hacer lo que esté a su alcance para poner fin a la guerra en Ucrania, sugirió mantener un diálogo abierto con la intención de lograr un alto al fuego a la brevedad posible y crear condiciones para alcanzar una solución pacífica.
El canciller ruso por su parte, manifestó que su país desea cooperar con Naciones Unidas ayudando a los civiles en Ucrania, para minimizar la compleja situación en la que se encuentran. Asimismo, ponderó que las relaciones internacionales viven el momento de la verdad y se decidirá si se respeta los principios de la carta de la ONU.
En el encuentro con el presidente Putin, Guterres recalcó su propuesta de la creación de un Grupo de Contacto Humanitario que permita que tanto Rusia, como Ucrania y la ONU, trabajen en conjunto para poder abrir corredores humanitarios seguros, lo que requeriría según el diplomático un alto al fuego local.
Por su parte, el presidente expresó su respaldo al trabajo realizado por la ONU. Rusia, dijo, como miembro permanente del Consejo de Seguridad, siempre ha apoyado a esta organización global. Al mismo tiempo, aprovechó para defender la operación militar en Ucrania, argumentando que Rusia tenía el derecho a reconocer la independencia de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter