El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, visitó Haití el sábado y nuevamente hizo un llamado a los gobiernos extranjeros con fuertes fuerzas de seguridad para ayudar al país en dificultades a combatir el aumento de la violencia de las pandillas.
El llamamiento se hizo después de que Guterres se reuniera con el primer ministro Ariel Henry, líderes de la sociedad civil, personal de la ONU y líderes de varios partidos políticos durante su viaje de un día.
Guterres se reunió con reporteros en el aeropuerto internacional de Haití en Port-au-Prince, quienes lo presionaron sobre si se desplegaría una fuerza de seguridad internacional como lo solicitó el primer ministro en octubre pasado. “No estoy aquí para decirles a los haitianos qué hacer. Estoy aquí para escucharlos y alentarlos a construir un consenso lo más amplio posible para hacer avanzar el proceso de transición”, dijo.
Henry, quien dirige el país desde el asesinato del presidente Jovenel Moise en julio de 2021, ha estado bajo presión para convocar elecciones. Sin embargo, los expertos han señalado que es imposible hacerlo dado el nivel actual de violencia en el país, con pandillas que controlan aproximadamente el 80% de la capital. No quedan instituciones elegidas democráticamente en Haití, y el país no ha celebrado elecciones legislativas desde octubre de 2019.
Haití necesita más ayuda humanitaria a medida que se profundiza la pobreza y aumentan los casos de hambruna. Las pandillas impiden el movimiento de bienes y personas y controlan el acceso al agua, los alimentos y la atención médica mientras los civiles intentan contraatacar mediante un levantamiento violento.
La visita de Guterres se produjo pocos días después de que el experto en derechos humanos de la ONU en Haití visitara el país y también pidiera una fuerza de seguridad internacional y un embargo de armas.
Redacción de: Karen Rodríguez
