La Comisión de la Verdad, uno de los organismos que se encarga de investigar los crímenes del conflicto armado en Colombia presentará este martes 28 de junio su Informe Final. El postrero acto, previo a esa publicación fue el haber sentado en el banquillo de los acusados a los últimos líderes del las FARC-EP.
Las audiencias promovidas por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), se llevaron a cabo los días 21, 22, 23 de la semana pasada. Los ex jefes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo, conocidas como FARC-EP, escucharon los testimonios de las víctimas, como parte del proceso de paz.
La JEP escogió como local para las audiencias una sala de la biblioteca Virgilio Barco Vargas en Bogotá, allí, los imputados y las víctimas ocuparon los extremos de la mesa, en el medio se sentaron las autoridades especiales previamente designadas. La causa investiga todo tipo de privación de libertad cometido por las FARC-EP.
Luego de reconocer los secuestros que cometieron para poder canjearlos por guerrilleros presos y también como una manera de financiarse, los ex líderes de las FARC-EP reconocieron el último día de las audiencias, los secuestros cometidos con el objetivo de ejercer un mayor control territorial.
Colombia tiene una historia conturbada en lo que se refiere a los grupos armados, sin embargo, tras décadas de conflictos, los antiguos movimientos guerrilleros FARC-EP firmaron los Acuerdos de Paz con el Estado colombiano el año 2016. Los ex jefes se comprometieron a decir la verdad y a reparar a las víctimas.
La audiencia reunió a siete ex comandantes del secretariado de las FARC-EP, entre ellos a Rodrigo Londoño, conocido como Timochenko, quienes reconocieron su responsabilidad en numerosos secuestros. Dijeron, que admitían la responsabilidad individual y colectiva frente a uno de los más abominables crímenes cometidos.
Para algunos especialistas, el hecho de que los ex comandantes de dichas organizaciones hayan reconocido su responsabilidad y pedido perdón a las víctimas y a la sociedad colombiana, es en sí, un gesto valioso de reparación a las víctimas. Asimismo, entienden que es una contribución vital a la verdad plural de lo sucedido en Colombia y un fuerte impulso para alcanzar la tan anhelada paz total.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter