Los 55 mil trabajadores de la educación de la provincia de Ontario, podrían realizar una huelga a partir del 3 de noviembre. La información de que los educadores de la primera infancia, los custodios y el personal administrativo puedan recurrir a esta medida de fuerza, la confirmó el Sindicato Canadiense de Empleados Públicos.
El disparador de esta potencial huelga se dio cuando el conciliador emitió un documento denominado “informe de no junta”, lo que significa que las conversaciones se encuentran en un punto muerto. Dicho documento había sido solicitado por el sindicato el pasado 7 de octubre.
De llevarse a cabo la interrupción laboral, el CUPE deberá comunicar con cinco días de antelación. Sin embargo, el informe establece una cuenta regresiva de 17 días, para que los trabajadores de la educación estén en una posición de realizar una huelga legal.
No se saben todavía detalles de cómo se daría un eventual paro, ni si éste sería completo. En verdad, hay la expectativa de que llegue a un acuerdo en los dos días de negociaciones que restan. Es posible que inicien el movimiento, con una campaña de trabajo para gobernar o pueden optar por seguir otros caminos.
El gremio que representa a los trabajadores de la educación, ha propuesto aumentos salariales del 11,7 por ciento al año, contra un 2 por ciento que es la contraoferta presentada por el gobierno provincial para los trabajadores que reciban menos de 40 mil dólares anuales. El resto de los trabajadores, recibiría un aumento del 1.25 por ciento. Esa disparidad en las propuestas, podría provocar la huelga que viene siendo anunciada por los trabajadores de la educación de Ontario.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter