Las autoridades mexicanas apresaron el domingo a ocho colombianos en el estado occidental de Michoacán, los cuales, se presume, integraban un grupo delictivo dedicado a la fabricación de explosivos para drones, un armamento cada vez más empleado por los cárteles del narcotráfico.
Según un comunicado la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán, las detenciones se realizaron durante un operativo en la localidad de Catalinas del municipio Buenavista, que forma parte de la denominada Tierra Caliente de Michoacán, en el que participaron elementos del Ejército, la Guardia Nacional y la policía estatal.
En el operativo fueron arrestados ocho colombianos, los cuales se presume son integrantes de un grupo que se dedica a fabricar explosivos para drones empleados por una organización criminal, indicaron autoridades estatales. En Michoacán operan varios grupos delictivos, entre ellos el cártel Jalisco Nueva Generación, que mantiene disputas con otras organizaciones por el control del territorio, como con el cártel de la Familia Michoacana.
Además de las detenciones, se incautó cuatro artefactos explosivos improvisados, una pistola, 16 cargadores y 1.040 cartuchos. Tras los arrestos se reportaron el domingo varios bloqueos viales en el municipio Buenavista, que las autoridades atribuyeron a miembros de grupos delictivos.
El Ejército indicó en agosto que los cárteles de la droga habían incrementado el uso de bombas transportadas por drones, algo desconocido en México antes de 2020. En los primeros ocho meses del año se han registrado 260 ataques de este tipo. Sin embargo, incluso esa cifra puede ser una subestimación. Los habitantes de algunas zonas de Michoacán dicen que los ataques con bombas desde drones suceden casi a diario.
Redacción de: Karen Rodríguez
