El gobierno federal anunció este jueves, que en los próximos días enviará más aviones para ayudar en la evacuación de personas que están bajo fuego cruzado en Sudán. Las autoridades de Ottawa, reconocieron que la planificación se torna más difícil, debido a la compleja situación por la que atraviesa ese país.
Según el ministerio de Asuntos Exteriores, de los que solicitaron ayuda, todavía se encuentran en Sudán poco más de 100 canadienses, este jueves partieron de Jartum, los dos primeros aviones de evacuación canadienses transportando a 118 personas, entre ciudadanos canadienses y de otros países aliados.
Previamente, habían sido registrados 1800 canadienses en Sudán, de estos, 200 abandonaron el país con la ayuda de países aliados como Alemania, El Reino Unido y Estados Unidos. La mayoría de los registrados, vive en la capital, Jartum, y por el momento no han decidido si van a abandonar dicho país, a pesar de la guerra.
Según Anita Anand, ministra federal de Defensa, la situación en Sudán es extremadamente crítica, sin embargo, se sintió complacida con la confirmación de que algunos vuelos habían tenido éxito. Asimismo, ratificó que hay 200 militares canadienses involucrados en estas misiones y que están trabajando de manera expedita en el rescate de los connacionales.
Sudán es un vasto país con 46 millones de habitantes, no obstante, una tercera parte de su población ya dependía de la ayuda humanitaria, antes del conflicto bélico. Ahora, ve limitada la distribución de alimentos, se estima que 50 mil niños padezcan de desnutrición aguda y han visto interrumpidos sus tratamientos debido al conflicto. Los pocos hospitales que aún funcionan enfrentan una escasez de suministros médicos, energía y agua, según la ONU.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter
