El Sindicato Canadiense de Empleados Públicos (CUPE), anunció que ha enviado un aviso de cinco días, tras lo cual, sus representados estarán en posición legal de empezar un paro el lunes 21 de noviembre. Este aviso de huelga, se ha presentado pocos días después de haber reanudado las negociaciones con el gobierno provincial.
Según los representantes de los 55 mil trabajadores de la educación de Ontario, por muy buena voluntad que existe de su parte en llegar a un acuerdo intermediario, el gobierno conservador del premier Doug Ford, mantiene su actitud de no invertir en los servicios que los estudiantes necesitan y que los padres de familia esperan.
La presidenta del Consejo de Sindicatos de las Juntas Escolares de Ontario (OSBCU), Laura Walton, afirmó que su gremio no tolerará a los acosadores en el aula y tampoco permitirá que haya uno en la mesa de negociaciones. Si no se llega a un acuerdo, los trabajadores de la educación realizarán una huelga el próximo lunes.
Según Walton, el aumento anual del 3,59 por ciento, ofrecido por el gobierno, podría ser aceptado, sin embargo, hay una serie de situaciones que deben ser resueltas, como por ejemplo, una estabilidad laboral, que las juntas escolares no intenten deshacerse de sus trabajadores y que se trabaje mejor el recorte de horas.
El sindicato pide que haya educadores de la primera infancia en todas las aulas de jardín de infantes, así como un aumento de asistentes educativos, secretarias en las escuelas, bibliotecarios y conserjes. Por su parte, el ministro de Educación Stephen Lecce, dijo que el gobierno no ha pedido ninguna concesión a cambio de los 335 millones de dólares, durante cuatro años, ofrecidos en el acuerdo salarial.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter
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