El trabajo en casa es amado por unos y odiados por otros pero, gracias al COVID-19, a todos les tocó una probadita de esta tendencia que, aunque se esperaba que se convirtiera en una forma de vida permanente, parece que tendrá su final ya que muchas empresas de Toronto están planeando regresar a la oficina a medida que se abren las cosas.
Las tasas de vacunación en Ontario continúan aumentando de forma impresionante y ha permitido que la provincia ahora esté en el Paso 3 de su marco de reapertura, por lo que, de alguna forma u otra, las cosas finalmente se sienten casi como lo hacían antes de COVID, con la reanudación de la mayoría de las operaciones comerciales y el regreso de actividades como eventos a gran escala y viajes sin restricciones; así que no es de sorprender que los directores ejecutivos se quieran unir a la tan anhelada normalidad y vuelvan a apoderarse de los espacios de oficina que abandonaron antes en la crisis de salud.
Se sabe que grandes empresas como Sun Life, RBC y Apple ya han publicado cómo abordarán el regreso al trabajo, todas ellas enfocándose en la flexibilidad, alternando los días de trabajo en casa y en oficina.
Sin embargo, el nuevo “problema” al que se enfrentan los políticos y empresarios en estos momentos es que los residentes dejen de vivir del CERB y regresen a su lugar de trabajo lo antes posible. “Lo que escucho ahora mismo en la provincia, en todas partes, todos los días de numerosas empresas es que no pueden contratar personas. Necesitan personas, pero están en casa. Amigos, eventualmente tenemos que volver al trabajo y hacer que las cosas se muevan de nuevo.Tenemos que poner en marcha la economía”, dijo el primer ministro Doug Ford.
Por su parte, la Ciudad de Toronto y la Junta de Comercio de la Región de Toronto han lanzado un nuevo programa para ayudar a las empresas y a su personal a volver al ritmo de las cosas a través de guías con las mejores prácticas y estrategias; y muchos residentes ya han indicado que están listos para regresar a un entorno de trabajo IRL.
