Ante el impacto creciente de fenómenos meteorológicos extremos en todo el país, ciudadanos canadienses exigen que los partidos políticos federales prioricen el cambio climático y la protección medioambiental en sus plataformas electorales.
El noreste de Calgary ha sido una de las zonas más afectadas, con tormentas de granizo recurrentes que han causado daños millonarios a viviendas en los últimos años. La granizada de 2024, en particular, fue la más destructiva registrada ese año, con pérdidas aseguradas que superaron los 3.000 millones de dólares en poco más de una hora, según datos de la Oficina de Seguros de Canadá (IBC, por sus siglas en inglés) .
La situación se repite en distintas regiones del país. En Jasper, los incendios forestales del verano pasado devastaron varias viviendas. Muchas de ellas, construidas hace décadas con materiales inflamables, no contaban con protecciones modernas frente a estos desastres.
Los expertos y afectados coinciden en que urgen una respuesta federal concreta. Propuestas como la modernización de viviendas con materiales más resistentes al clima extremo y programas de incentivos para la construcción en zonas de alto riesgo ganan fuerza entre la ciudadanía.
Aumento de primas de seguro por daños por eventos climáticos
Según cifras de la IBC, los daños asegurados por eventos climáticos extremos alcanzaron casi los 9 mil millones de dólares en 2024 , triplicando las pérdidas del año anterior. En la última década, los costos financieros directos para aseguradoras y propietarios han superado los 30 mil millones de dólares, afectando a más de un millón de hogares canadienses.
A esta problemática se suma el aumento en las primas de seguros. En algunas zonas, las aseguradoras incluso se niegan a ofrecer cobertura debido al riesgo elevado. Este es el caso de varios sectores en Calgary, donde los residentes han visto rechazados por compañías aseguradoras, pese a no haber sufrido daños directos en sus propiedades.
“El acceso al seguro de hogar se está volviendo cada vez más limitado y costoso”, señaló Craig Stewart, vicepresidente de asuntos federales de la IBC. “Las aseguradoras están ajustando su exposición y eso significa que los propietarios están asumiendo una mayor parte del riesgo”.
El incremento de los fenómenos extremos, como granizadas, incendios forestales e inundaciones, ha puesto en evidencia la urgencia de una estrategia nacional de resiliencia climática. Mientras tanto, los ciudadanos afectados siguen esperando soluciones concretas por parte del gobierno federal.
Redacción de: Karen Rodríguez A.
