A medida que Ontario avanza en el tercer y último paso del plan de reapertura económica, la pregunta de qué viene a continuación es lo más importante para muchos, especialmente cuando se trata de entornos de alto riesgo y contacto cercano, como las aulas de clases.
El Ministerio de Colegios y Universidades de la provincia envió un memorando a principios de esta semana en el que les decía a las instituciones postsecundarias que deberían planificar efectivamente el regreso a la normalidad cuando las clases en persona se reanuden este otoño: sin límites de capacidad, sin mandatos de distanciamiento físico.
Las máscaras seguirán siendo necesarias en el interior y las escuelas, obviamente, tendrán que seguir cualquier otra orden de salud pública que esté legalmente en vigor, pero la viceministra Shelley Tapp dijo que se prevé que todas las actividades en el campus se permitirán nuevamente en septiembre.
Algunas instituciones ya se han encargado de anunciar reglas específicas propias además de las restricciones existentes; Seneca College, por ejemplo, anunció la semana pasada que todos los estudiantes y el personal deberán tener un comprobante de vacunación para poder estar en el campus.
Ryerson, Western y U of T informaron que los estudiantes que tienen planeado vivir en la residencia deben estar vacunados, pero ninguno ha llegado tan lejos como Seneca al exigir que todo el personal, estudiantes y visitantes, independientemente de si viven en el campus, este vacunado contra COVID-19.
Sin embargo, U of T ha decidido, a diferencia de Seneca, que los estudiantes no necesitarán ser vacunados para poder asistir a clases este otoño. “Sabemos que puede haber estudiantes que no tengan acceso a las vacunas, y estamos trabajando con nuestros socios de atención médica para que sea lo más fácil posible para los estudiantes, incluidos los que llegan de fuera de Canadá, vacunarse por completo este otoño”, dijo un portavoz de la Universidad de Toronto.
La escuela aún alienta a todos los estudiantes a obtener la primera vacuna aprobada por la OMS disponible para ellos, y ha declarado varias veces que continuará basando sus decisiones en el consejo de expertos en salud pública; por lo tanto, los requisitos pueden cambiar en cualquier momento.
Afortunadamente para la escuela mejor calificada, muchos de sus estudiantes locales ya han recibido al menos una dosis de una vacuna COVID-19 aprobada. Según el Ministerio de Salud de la provincia, el 80% de todos los adultos han sido vacunados al menos parcialmente contra el coronavirus, mientras que poco más del 65% han recibido dos inyecciones de una vacuna.
