Los cubanos se preparan para un verano que, según los especialistas, podría ser más caluroso de lo habitual, sin agua y con constantes cortes de electricidad. Un total de 132.877 residentes de La Habana tienen afectaciones con el suministro de agua potable y las autoridades han reconocido que no existe una solución inmediata para el problema, pues parte de los equipos que necesitan llegarán al país a finales de agosto.
La escasez, relacionada con el envejecimiento y la decadencia de las infraestructuras de la isla, afecta a entre 100.000 y 200.000 ciudadanos de La Habana, lo que equivale al 10% de la población de la ciudad, según informaron los medios estatales a finales de la semana pasada.
Según las autoridades locales, la escasez de agua se debe a diversos factores, como estaciones de bombeo motorizadas defectuosas, tuberías con fugas y la sequía provocada por el cambio climático.
Ricardo Limias Díaz, delegado del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, señaló que Cuba prevé montar un equipo en Ariguanabo para incrementar el suministro de agua a las zonas de Marianao, Playa y La Lisa y acelerar la reparación de los que se encuentran fuera de servicio. No obstante, aclaró que en estos momentos están esperando que los pedidos lleguen al país.
El funcionario destacó que “se está trabajando una importación, la primera parte de 12 equipos se espera arribe el día 31 de julio y deben incorporarse en la primera semana de agosto. La segunda parte de esos equipos, hasta completar 23, debe llegar a finales de agosto”.
Redacción de: Karen Rodríguez
