Iqaluit está recibiendo 214 millones de dólares del gobierno federal para reparar su infraestructura de agua después de que el agua de la capital de Nunavut se contaminara con combustible dos veces en los últimos seis meses.
El primer ministro Justin Trudeau anunció la financiación en una conferencia de prensa virtual.
Él dice que el dinero se utilizará para crear un nuevo depósito de agua y un sistema de distribución de agua.
Los cerca de 8.000 residentes de la ciudad no pudieron beber agua del grifo durante 60 días el otoño pasado después de que se descubrió que estaba contaminada con combustible.
La planta de tratamiento ha estado fuera de servicio desde enero, cuando se encontró nuevamente combustible en el agua.
El Qikiqtaaluk Environmental dijo que aún no se habían completado la limpieza de la planta de tratamiento de agua.
“Todavía hay mucha limpieza ambiental que debe hacerse en la planta”, dijo Bell.
“Obviamente, la gente debería estar preocupada. Todos queremos el agua prístina a la que estamos acostumbrados”.
Con temperaturas de menos treinta, algunos residentes han comenzado a perforar agujeros en el hielo en el río Sylvia Grinnell, en las afueras de la ciudad, para obtener agua.
La ciudad había pedido previamente a Ottawa $ 180 millones para reparar su infraestructura de agua envejecida.
