Las promesas de que las nuevas negociaciones entre el Sindicato Canadiense de Empleados Públicos (CUPE) y el gobierno de Ontario, beneficiarían a los trabajadores de la educación, parecen desvanecerse, pues varias de las propuestas en temas considerados claves por ambas partes, se encuentran lejos de llegar a un acuerdo.
Los trabajadores de la educación mostraron buena voluntad de seguir negociando al retornar a sus labores el último día martes, sin embargo, sus representantes han afirmado que no aceptarán una oferta de “dos niveles” como propone el gobierno provincial. Un aumento salarial de esa forma, sería la última oferta del gobierno.
En un comunicado del comité de negociación, publicado este miércoles y dirigido a sus trabajadores, se lee que sus representantes han sido muy claros, que tendrán que llegar a un acuerdo con un aumento sustancial de la tarifa plana. La oferta, no es suficiente para lo que los trabajadores necesitan para ratificar un acuerdo.
Según fuentes gubernamentales, la última oferta contempla un aumento anual del 3,5 por ciento para los trabajadores peor remunerados y un aumento próximo al 2 por ciento para los demás. La oferta anterior era de 2,5 por ciento y 1,5 por ciento, respectivamente. Esos valores que habían sido impuestos, ahora serían derogados.
Por ahora CUPE, no ha recibido la nueva oferta, no obstante, dijeron que de recibirla, no la recomendarían a sus representados. Ya el premier Doug Ford, se negó a comentar un eventual rechazo, arguyendo que el mediador le habría pedido no hablar del tema. El sindicato ha confirmado que está listo para retornar a una huelga si las conversaciones no progresan, tomarían el cuidado de avisar cinco días antes.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter
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