En un concurrido evento realizado en el Empire Club of Canada, en el centro de Toronto, la ministra federal de Finanzas, Chrystia Freeland, fue la encargada de proferir el discurso de apertura. La ministra se refirió al estado general de la economía canadiense y destacó el Plan de Asequibilidad del gobierno federal.
Freeland, calificó el mencionado plan como un conjunto de medidas por un valor total de 8.9 mil millones de dólares, presentándolo como un nuevo apoyo para los canadienses este 2022. Se pronunció, en una circunstancia bastante difícil, debido a una inflación extraordinariamente alta y con las tasas de interés en aumento.
A pesar de presentar estas medidas como novedosas y de gran apoyo para mejorar la vida de los canadienses, la verdad es que esas medidas ya se conocían, pues habían sido anunciadas previamente. Todas esas disposiciones, estaban incluidas en los últimos presupuestos federales y ahora están siendo ejecutadas.
La ministra reconoció el difícil momento por el que atraviesa la economía, no obstante, dijo que el gobierno está preparado para enfrentar los desafíos y entiende que Canadá tiene más posibilidades de salir airosa que otros países. Debemos ser ágiles y estar abiertos a más acciones a medida que se desarrolla la situación, dijo.
También fue cuestionada sobre bajar los impuestos a la gasolina para que los precios finales cedan, respondió que el gobierno está abierto para tomar las mejores decisiones. Ponderó que no puede hacer muchas promesas en el corto plazo, pues el actual memento económico tiene un fuerte componente coyuntural a nivel global.
Por su parte, los partidos de la oposición no se guardaron sus críticas y exigen resultados palpables al gobierno federal. Los neodemócratas proponen que las grandes corporaciones paguen más impuestos y que lo recaudado se distribuya entre los más necesitados, mientras que los conservadores han pedido mayores recortes en los impuestos. Los liberales deben asumir sus responsabilidades, finalizaron.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter
