Corregir el desajuste climático y frenar la pérdida de biodiversidad son algunos de los retos para la próxima década, según el director de la cumbre del clima, COP28 que se celebra en Dubái a principios de diciembre. Sin embargo, desde ya se vislumbran obstáculos y falta de consenso, por la actual crisis energética y la inflación.
“Hay un número significativo de países que se oponen a la transición gradual. La forma en que funciona el proceso de la COP28, y creo que parte de la frustración de la cumbre, es que funciona por consenso. Basta con que un país diga ‘no’ y no habrá acuerdo”, explicó Adnan Amin, Director Ejecutivo de la COP28.
El consenso es indispensable para lograr la decisiva transición energética; sin embargo, limitar el calentamiento global a 1,5°C, el compromiso al que se llegó con el Acuerdo de París en la COP21 hace ocho años, no parece fácil en este momento.
“Espero que en un país productor de petróleo se pueda lograr un buen resultado respecto al cambio climático. Además del ‘bla, bla, bla’ se pueden lograr resultados, cambiar de rumbo para llevarnos al bienestar de todos”, son algunas de las expectativas del director de la COP28.
Entre los principales desafíos de esta cumbre está el elaborar el primer balance mundial de emisiones de CO2, alinear los esfuerzos y establecer un plan de acción. La COP28 tendrá lugar entre el 30 de noviembre y el 12 de diciembre en Dubái, en Emiratos Árabes Unidos, uno de los mayores productores de petróleo y de gas del mundo.
Redacción de: Karen Rodríguez
