La ciudad de Calgary anunció que a partir del 30 de junio se reintroducirá oficialmente el flúor en el suministro de agua potable. Esta medida, promovida como una estrategia de salud pública tiene como objetivo principal prevenir las caries dentales y mejorar la salud bucal de la población.
La reintroducción del flúor responde al mandato ciudadano expresado en el plebiscito realizado durante las elecciones cívicas de 2021. En dicha consulta, el 62% de los votantes se mostró a favor de volver a añadir este compuesto al agua potable, luego de su eliminación en años anteriores. Con esta decisión, Calgary se alinea nuevamente con las prácticas recomendadas por organismos nacionales e internacionales de salud pública.
Medida respaldada por evidencia y con fuerte inversión pública
El flúor se encuentra de manera natural en el suelo, el aire y cuerpos de agua como los ríos Bow y Elbow, de los cuales se abastece la ciudad. Sin embargo, para lograr un nivel considerado óptimo para la prevención de caries, las plantas de tratamiento aumentarán la concentración del compuesto a 0,7 miligramos por litro. Este valor está en línea con las recomendaciones de la Guía para la fluoración del agua comunitaria de Salud Canadá, que establece este nivel como el ideal para mantener la salud bucal sin representar riesgos para la población.
La implementación de esta medida ha requerido una inversión significativa por parte del gobierno local. Calgary destinó 28,1 millones de dólares a la adecuación de infraestructura en ambas plantas de tratamiento, además de proyectar un gasto operativo anual adicional de aproximadamente un millón de dólares para garantizar el mantenimiento del sistema.
Organizaciones profesionales como la Asociación Dental de Alberta han respaldado la decisión, señalando que, desde que se suspendió la fluoración del agua, se ha observado un aumento en los casos de caries. Según estas entidades, el restablecimiento de la fluoración podría tener un impacto directo y positivo en la salud dental, en especial en poblaciones vulnerables como niños y adultos mayores.
No obstante, el debate sobre la refluoración no ha estado exento de oposición. Algunos ciudadanos han expresado dudas sobre la medida, argumentando que cualquier intervención de este tipo debería contar con un consentimiento informado y con mayores niveles de participación pública. A pesar de estas posturas, el resultado del plebiscito y el respaldo técnico de las autoridades sanitarias han sido determinantes para el avance del proyecto.
Las autoridades municipales destacan que la fluoración del agua es una medida adoptada ampliamente en múltiples ciudades alrededor del mundo y que ha demostrado, a lo largo de varias décadas, ser segura, efectiva y costo-efectiva en términos de salud pública. Con esta reintroducción, Calgary busca reducir las desigualdades en el acceso a la prevención dental y disminuir los costos asociados al tratamiento de caries y otras enfermedades bucodentales.
Redacción de: Karen Rodríguez A.
