El primer ministro, Mark Carney, se reunió el lunes en Saskatoon, Saskatchewan, con los trece primeros ministros provinciales y territoriales para examinar los proyectos más importantes de cada unidad de la federación e intentar acelerar su desarrollo.
La propuesta del gobierno federal es priorizar la infraestructura energética, sin embargo, tras el encuentro, Mark Carney vio que encontrará dificultades para viabilizar con mayor rapidez los proyectos de construcción nacional, por lo fragmentada que es la federación.
No fue posible, como esperaba el primer ministro, salir con una lista detallada de las prioridades de cada provincia o territorio, Carney se tuvo que limitar a esbozar los principios generales que más adelante guiarán la selección de grandes proyectos de infraestructura.
Mark Carney, declaró que uno de los objetivos de la reunión es generar la estabilidad, la certidumbre y la ambición que necesitan los constructores para catalizar una gran inversión que convierta al país en una superpotencia energética y en la economía más sólida del G7.
Qué dijeron los primeros ministros
Los primeros ministros manifestaron en un comunicado, que Canadá debe trabajar urgentemente para llevar los recursos naturales y las materias primas canadienses a los mercados nacionales e internacionales diversificados, incluyendo Asia y Europa.
La premier de Alberta, Daniele Smith, salió optimista de la reunión y elogió el cambio de tono del gobierno federal, afirmando que los oleoductos son fundamentales para la unidad nacional y celebró la propuesta de convertir a Canadá en una superpotencia energética.
Doug Ford, premier de Ontario, dijo que fue la mejor reunión de los últimos años y que espera desarrollar la región minera del Anillo de Fuego en el noroeste de su provincia. Para el premier de Manitoba, Wab Kinew, es una oportunidad generacional para los canadienses, pero, añadió que no se debe descuidar a los más pobres ni a las comunidades indígenas.
El reclamo de las Primeras Naciones
La Asamblea de las Primeras Naciones, considera que las autoridades no han consultado lo suficiente con las comunidades indígenas que se verán afectadas. Agregó que no conocen bien el proyecto de aprobaciones aceleradas y que este hecho, podría generar conflictos.
En relación a los proyectos de construcción nacional, dijeron que los diversos gobiernos deberían comenzar por acelerar los aspectos básicos como el agua potable, viviendas de calidad, escuelas modernas y carreteras transitables, es decir, infraestructura comunitaria.
Ellos se basan en la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, que exige que su comunidad sea consultada antes de aprobar los proyectos.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporte
