En medio del año electoral, el presidente Joe Biden ha anunciado un plan para ofrecer alivio a cientos de miles de inmigrantes sin estatus legal en Estados Unidos. Este esfuerzo busca equilibrar las recientes medidas estrictas en la frontera sur, que han generado críticas tanto de defensores de los derechos de los inmigrantes como de legisladores demócratas.
La Casa Blanca informó el martes que, en los próximos meses, ciertos cónyuges de ciudadanos estadounidenses sin estatus legal podrán solicitar la residencia permanente y eventualmente la ciudadanía. Esta medida podría beneficiar a más de medio millón de inmigrantes, según altos funcionarios de la administración. Para calificar, los inmigrantes deben haber residido en Estados Unidos durante al menos 10 años a partir del lunes y estar casados con un ciudadano estadounidense.
Si se aprueba su solicitud, tendrán tres años para obtener una tarjeta verde y recibir un permiso de trabajo temporal, protegiéndolos de la deportación mientras tanto. Además, alrededor de 50.000 niños no ciudadanos, cuyos padres están casados con ciudadanos estadounidenses, también podrían calificar para este proceso.
Contexto político
Este anuncio coincide con el 12º aniversario del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), una directiva de la era Obama que ofrecía protecciones contra la deportación y permisos de trabajo temporales para jóvenes inmigrantes sin estatus legal. Biden tiene previsto hablar sobre sus planes en un evento en la Casa Blanca para conmemorar este aniversario.
La administración de Biden ha enfrentado críticas tanto por sus medidas en la frontera como por su manejo de la inmigración en general. Los demócratas buscan contrastar a Biden con el presunto candidato republicano Donald Trump, quien ha prometido políticas de deportación masiva si es reelegido. La campaña de Trump acusó a Biden de fomentar la inmigración ilegal a través de esta nueva medida.
Altos funcionarios de la administración anticipan que el proceso para solicitar este beneficio estará abierto a finales del verano. Las tarifas asociadas aún no han sido determinadas. Este esfuerzo podría desencadenar una intensa campaña de organizaciones latinas para maximizar el número de solicitantes antes de un posible cambio en la administración presidencial.
El anuncio se produce dos semanas después de que Biden implementara una estricta represión en la frontera entre Estados Unidos y México, restringiendo efectivamente las solicitudes de asilo para quienes llegaban fuera de los puertos de entrada designados. Esta directiva ha llevado a una disminución de los encuentros fronterizos, aunque ha sido objeto de demandas por parte de grupos de derechos de los inmigrantes.
Redacción de: Karen Rodríguez A.