Cientos de personas, entre familiares de las víctimas, funcionarios y miembros de la comunidad, se reunieron este miércoles en un emotivo homenaje para conmemorar el quinto aniversario del derribo del vuelo PS752 de Ukraine International Airlines. El avión transportaba a 55 ciudadanos canadienses y 30 residentes permanentes, entre ellos estudiantes, profesionales y familias que tenían conexiones profundas con Canadá.
La ceremonia, organizada por la Asociación de Familias de Víctimas del Vuelo PS752, se llevó a cabo en un teatro repleto de fotografías, velas y flores en honor a las 176 personas fallecidas el 8 de enero de 2020. El primer ministro Justin Trudeau asistió al evento y reafirmó el compromiso de Canadá de buscar justicia y responsabilizar al régimen iraní. “El dolor que sienten hoy es tan real como hace cinco años”, dijo Trudeau, destacando que todo Canadá comparte la esperanza de verdad y rendición de cuentas.
Exigencia de rendición de cuentas
El avión fue derribado en medio de tensiones entre Irán y Estados Unidos, pocos días después del asesinato del comandante iraní Qassem Soleimani. Durante tres días, las autoridades iraníes ocultaron que el avión había sido derribado intencionalmente, atribuyéndolo inicialmente a un accidente técnico. Un tribunal militar iraní condenó en abril de 2023 al operador del misil a 13 años de prisión, pero muchas familias consideran insuficiente el proceso judicial.
El abogado Mahmoud Alizadeh Tabatabai, representante de varias familias, criticó duramente la falta de transparencia y el acceso limitado al expediente judicial. A pesar de las apelaciones, el caso sigue estancado en el sistema judicial iraní, mientras las familias continúan buscando respuestas.
Canadá y otros países afectados, como Suecia, Ucrania y el Reino Unido, han llevado el caso ante la Corte Internacional de Justicia y la Organización de Aviación Civil Internacional. Las investigaciones y demandas buscan que Irán asuma plena responsabilidad por la tragedia, en medio de denuncias de encubrimiento y un juicio que muchas familias consideran poco transparente.
Más temprano, Trudeau emitió una declaración oficial para honrar a las víctimas y reiteró que Canadá seguirá presionando por respuestas. Pierre Poilievre, líder del Partido Conservador, también destacó la importancia de garantizar justicia para las familias afectadas.
El evento en Richmond Hill fue uno de varios realizados en países como Alemania, Suecia, Reino Unido y Estados Unidos. En todos, el mensaje fue claro: mantener viva la memoria de las víctimas y exigir justicia para las familias que aún buscan respuestas, cinco años después de la tragedia.
Redacción de: Karen Rodríguez A.
