Políticos de oposición en la Asamblea Legislativa de Ontario, denuncian que el organismo de control del mercado de alquileres casi nunca multa a los propietarios cuando desalojan ilegalmente a los inquilinos y cuando los multa, los valores generalmente no pasan de dos mil dólares.
Según los diputados que realizan la denuncia, los nuevos datos muestran que la mayor parte de los valores exigidos a los propietarios, son menores al costo de un mes de alquiler, permitiendo que muchos inquilinos sean perjudicados con desalojos ilegales.
Esta realidad puede ser impactante principalmente en ciudades como Toronto, donde los precios de los alquileres son elevadísimos. Además, no habría un control estricto, de las 51 multas emitidas en los últimos cuatro meses, apenas un propietario ha abonado.
Janet Deline, portavoz de Tribunales Ontario, órgano que opera la Junta de Arrendatarios e Inquilinos, declaró que la agencia no verifica el resultado de sus solicitudes y que cada multa depende de un árbitro individual. Sólo actúa cuando el propietario muestra un flagrante desprecio por la Ley de Arrendamientos Residenciales (RTA).
Para Deline, otros recursos no han proporcionado la disuasión y el cumplimiento adecuado de las normas. Jessica Bell, crítica de vivienda del NDP, afirma que las reglas no están ayudando a los inquilinos y no se están haciendo cumplir. Esto queda muy claro, declaró.
De acuerdo con Bell, a pesar de un proyecto aprobado en 2020, que duplica las multas máximas a 50 mil dólares para propietarios individuales y 250 mil para corporaciones, los datos muestran que de las 51 multas, 24 fueron de mil dólares o menos, 15 eran de mil a dos mil dólares y 9 estaban entre dos mil y cinco mil dólares. Apenas una fue de $75 mil.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter
