La Arquidiócesis de Puerto Príncipe, junto con la Conferencia de Religiosos de Haití, emitió una enérgica carta el lunes exigiendo la liberación inmediata de seis monjas secuestradas la semana pasada. En la misiva, los líderes religiosos expresaron su preocupación por el “reinado de terror” impuesto por grupos armados en Haití y pidieron al gobierno que tome medidas firmes contra la violencia de pandillas.
La carta señala la fatiga generalizada entre los haitianos debido a la violencia y destaca la necesidad de que las autoridades gubernamentales protejan a la población y sus propiedades. “En muchas ocasiones, la Iglesia ha denunciado su silencio, que es similar a una actitud de desprecio por el sufrimiento de las personas”, afirma la carta.
La Arquidiócesis criticó la falta de una respuesta seria a la ola de secuestros que afecta al país desde hace más de dos años, describiendo la situación actual como “cada vez más confusa y caótica”.
Las monjas fueron secuestradas el pasado viernes mientras viajaban en un autobús por Puerto Príncipe. Hasta el momento, ningún grupo ha asumido públicamente la responsabilidad del secuestro.
El Papa Francisco también se sumó al llamado a la liberación, expresando su tristeza y pidiendo armonía social en Haití.
Las pandillas han sido responsables de un alarmante aumento en los secuestros en Haití, con casi 2.500 personas secuestradas el año pasado, representando un aumento del 80 por ciento en comparación con el año anterior, según datos de la ONU.
La situación ha sumido a la policía en una crisis, ya que se enfrenta a la abrumadora tarea de combatir la delincuencia con recursos limitados y personal insuficiente en un país de más de 11 millones de habitantes.
Redacción de: Karen Rodríguez A.