“Iba a la máquina de coser de mi madre y jugaba con las perillas”, recuerda Chizoba Udeh-Martin, sobre su temprana fascinación por la costura.
Sus primeros recuerdos del diseño de moda se remontan a su infancia en Nigeria, cuando vio a su tía diseñar y coser su propio vestido de novia desde cero. Chizoba dice que la experiencia plantó las semillas para que algún día se convirtiera en diseñadora por derecho propio.
Recuerda que su tía había comprado “varios metros de tela de raso blanco” y Chizoba, de niña, observaba todo el proceso con curiosidad y fascinación. Antes de lanzar su propia marca en 2016, trabajó como especialista en arreglos para Kleinfeld , asombrada por el trabajo que se realizaba en los vestidos de novia. Allí decidió que la llamaban para diseñar sus propios vestidos.
Aunque sus diseños no son exclusivamente nupciales, es su ocasión favorita para diseñar. Ella describe el proceso como “íntimo”, sintiéndose honrada de crear vestidos de ensueño para sus clientes en una de sus ocasiones más memorables.
Mi objetivo es crear piezas elegantes que celebren a cada individuo que usa Zoba Martin”, dice el diseñador.
hizoba tiene una forma de hacerte sentir especial, ya sea creando el vestido de tus sueños o dándote una pequeña botella de burbujas y llevándote a su cuento de hadas de la moda.
A pesar de incursionar en el prêt-à-porter, Chizoba prefiere el aspecto sostenible de las piezas personalizadas y hechas por encargo para su clientela. Confía en que sus piezas hechas a medida tienen un valor sentimental y es muy probable que se conserven y se transmitan de generación en generación.
