Toronto continúa viviendo su paisaje invernal tras una serie de intensas tormentas de nieve que han dejado acumulaciones significativas en toda la ciudad. Las autoridades municipales han confirmado que los trabajos de limpieza se prolongarán durante varias semanas, lo que supone un desafío tanto para el tránsito vehicular como para los peatones, quienes deben sortear montículos de nieve y aceras cubiertas de hielo.
A pesar del frío persistente, la primavera comienza a dar señales de su inminente llegada. Uno de los indicadores más evidentes es el aumento en la duración de los días. Desde el solsticio de invierno el pasado 21 de diciembre, Toronto ha superado las 10 semanas más oscuras del año, y con la llegada de marzo, la luz diurna comienza a extenderse considerablemente.
Horario de verano
El próximo domingo 9 de marzo, los relojes deberán adelantarse una hora, marcando el inicio del horario de verano en gran parte de Canadá. Aunque esta modificación implica perder una hora de sueño la noche del cambio, también conlleva una ventaja: las tardes serán más largas, permitiendo disfrutar de una mayor cantidad de luz solar. Por ejemplo, el sábado 8 de marzo, la puesta de sol ocurrirá a las 18:16 horas, pero el domingo 9 de marzo se retrasará hasta las 19:17 horas, ofreciendo una sensación de jornadas más extensas y alentando actividades al aire libre pese al frío.
El debate sobre el cambio de horario continúa generando opiniones divididas. Muchos ciudadanos consideran que esta práctica es obsoleta y disruptiva para los ritmos de sueño y trabajo. Ontario ha aprobado una legislación para eliminar el ajuste horario, pero su aplicación depende de que otras provincias y estados vecinos, como Quebec y Nueva York, tomen la misma decisión, algo que aún no ha sucedido. En contraste, algunas regiones de Canadá, como Saskatchewan, Yukón y partes de Quebec, Columbia Británica y Nunavut, han optado por prescindir del cambio al horario de verano.
Mientras tanto, la primavera está cada vez más cerca. El equinoccio de primavera, el 20 de marzo, marcará oficialmente el cambio de estación, con jornadas que ofrecerán 3 horas y 14 minutos más de luz solar en comparación con el solsticio de invierno. Aunque la nieve sigue cubriendo las calles de Toronto, el aumento gradual de la luminosidad es un indicio claro de que los días más cálidos y soleados no tardarán en llegar.
Redacción de: Karen Rodríguez A.
