Redadas policiales contra bandas de narcotraficantes en tres estados brasileños han dejado al menos 45 muertos. En la última operación en Río de Janeiro, la policía dijo que devolvió el fuego en un tiroteo en el área de Complexo da Penha, matando al menos a 10.
Anteriormente, 16 personas murieron en enfrentamientos durante una redada policial de cinco días en el estado de São Paulo, denominada Operación Escudo; y en el estado nororiental de Bahía, las autoridades dicen que 19 sospechosos han sido asesinados desde el viernes.
Brasil, el país con el mayor número de asesinatos en el mundo, también alberga algunas de las fuerzas policiales más mortíferas del planeta. Regularmente luchan contra las bandas de narcotraficantes y las milicias de autodefensa que han colonizado muchos de los barrios pobres o favelas de clase trabajadora de Brasil.
Cincuenta y ocho personas fueron detenidas durante la operación en el estado de São Paulo, que comenzó después de que un policía de las fuerzas especiales fuera asesinado el jueves en la ciudad costera de Guarujá.
Según la policía militar de la ciudad, la operación en Complexo da Penha, un grupo de favelas en el norte de la ciudad, se inició luego de que información de inteligencia sugiriera que en la zona se estaría realizando una reunión de cabecillas del narcotráfico. Durante los operativos, la policía incautó 385 kg de narcóticos, así como armas, según medios locales.
Redacción de: Karen Rodríguez