Con una inversión de $8.4 millones durante tres años, el Gobierno de Ontario ayudará a la policía a ofrecer la respuesta más adecuada a las llamadas de personas que experimentan una crisis de salud mental o adicciones, lo que puede incluir el desvío a los servicios de salud mental adecuados, a través de un nuevo Programa de Desvío de Llamadas de Crisis de la Policía Provincial de Ontario (OPP).
“Nuestro gobierno se enorgullece de tomar medidas para mejorar la atención de la salud mental y otras situaciones de crisis aguda a través del Programa de desvío de llamadas en caso de crisis.Al ofrecer servicios críticos de respuesta a crisis, los especialistas dedicados en salud mental y adicciones garantizarán que las personas que atraviesan una crisis puedan acceder a apoyos inmediatos y desviar la necesidad de intervenciones policiales en situaciones que no son de emergencia”, dijo la procuradora general Sylvia Jones.
El Programa de Desvío de Llamadas de Crisis consiste en un trabajador de crisis de adicciones y salud mental profesional que estará integrado en cada uno de los Centros de Comunicaciones Provinciales de OPP. Una vez asignado a la llamada, el trabajador de crisis puede ayudar a las personas que experimentan una crisis proporcionándoles recursos y herramientas, ofreciendo referencias y ayudándoles a navegar por el sistema de salud mental en busca de ayuda; de igual forma, el trabajador de crisis también puede brindar apoyo y ayudar en la desescalada preliminar cuando se ha asignado una llamada a un oficial de policía.
El programa, que se puso a prueba con éxito en el Centro de Comunicaciones de OPP de Londres, ha ayudado a las personas que llaman con una variedad de situaciones de crisis aguda, que incluyen, entre otras, problemas de salud mental o uso de sustancias, conflictos de relación y preocupaciones familiares. El programa ahora se ha implementado en una segunda ubicación, el Centro de Comunicaciones OPP Thunder Bay, y se implementará en Centros de Comunicaciones adicionales a finales de este año.
Entre el 2 de noviembre de 2020 y el 6 de junio de 2021, los trabajadores de crisis participaron en 478 llamadas, el 16% de las cuales se desviaron por completo de la respuesta de los oficiales de primera línea. Las llamadas restantes requirieron la asistencia de un oficial donde el trabajador de crisis permaneció en la llamada, ayudó en la reducción preliminar, brindó apoyo y remisión a recursos comunitarios o conectó a personas con los servicios comunitarios apropiados para apoyar sus necesidades.“Nuestros oficiales responden a miles de llamadas de salud mental al año. El Programa de desvío de llamadas en caso de crisis no solo reduce el uso de personal policial para respuestas que no son de emergencia cuando es apropiado, sino que también ayuda a las personas que experimentan crisis de salud mental al ofrecer mejores vías para satisfacer sus necesidades y apoyar la desestigmatización de la salud mental”, dijo el comisionado de la OPP, Thomas Carrique.
