Una vez más la ingenuidad y el miedo hicieron víctimas a tres mujeres de Ontario, que fueron estafadas tras responder una llamada telefónica supuestamente proveniente de una entidad bancaria. Fueron advertidas de que su dinero corría peligro y debían transferirlo.
A pesar de las advertencias de las autoridades, las personas todavía caen en este tipo de timo que es muy frecuente y existe hace muchos años. Las instituciones que luchan contra este delito recomiendan tomar extremado cuidado al atender llamadas sin verificar.
Por otro lado, el Centro Canadiense Antifraude (CAFC), en conjunto con la Oficina de Fraudes Graves (SFO), de la Policía Provincial de Ontario (OPP), han reportado que este tipo de estafas han sustraído de sus víctimas, cientos de miles de dólares en los últimos años.
Las víctimas
Una de las perjudicadas por la estafa es Petra Shim, residente en Port Hope, ella dijo que los timadores sacaron de sus cuentas 45 mil dólares. Agregó, que los truhanes conocían su nombre completo, su fecha de nacimiento, su dirección, su correo electrónico y evidentemente su número telefónico. Le dijeron que la llamaban de su banco.
En el caso de Kristen Ernest, que vive en London, el estafador se identificó como empleado del departamento de fraude de su banco y le advirtió que su cuenta estaba siendo usada para el blanqueo de capitales y el narcotráfico y que para asegurar sus fondos debería seguir sus instrucciones. Kristen Ernest le creyó y acabó perdiendo 13,500 dólares.
A su vez, Raquel Pineda, residente de Toronto, declaró a la prensa que recibió una llamada de un supuesto empleado de su banco, diciéndole básicamente lo mismo que a Ernest, ella no desconfió y deseando solucionar su “problema”, siguió las instrucciones del impostor. Pineda, que trabaja como empleada de limpieza, perdió todos sus ahorros de 9 mil dólares.
Recomendaciones para no caer en estafas telefónicas
Para el responsable de divulgación del Centro Canadiense Antifraude (CAFC), Jeff Horncastle, la mayor parte de las estafas cuentan con la colaboración involuntaria de las propias víctimas, quienes realmente creen que están cooperando con el trabajo del banco.
La recomendación más importante del CAFC, para no ser víctima de una estafa, es jamás compartir información bancaria como números de cuenta, nombre del usuario y mucho menos su contraseña. Los malhechores suelen falsificar números de agencias de bancos.
Asimismo, que tengan atención a diálogos extraños como que su banco le pide que participe de operaciones encubiertas, que mienta, que guarde secretos o que investigue a empleados de su banco. Las entidades financieras nunca proceden de ese modo. Para las tres víctimas de esta nota, los bancos deben hacer más para prevenir el fraude y proteger a sus clientes.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporte
