Un nuevo informe sobre asequibilidad presentado recientemente por la organización sin fines de lucro CivicAction, revela que las personas de ingresos medios buscan cada vez más abandonar Toronto, debido a los altos costos de la vivienda, así como a la congestión.
De acuerdo con el informe presentado, se trata de un fenómeno poco perceptible y de continuar el abandono de la ciudad por parte de los trabajadores esenciales, éste podría transformarse en un gran problema para la municipalidad en el mediano y largo plazo.
Para la directora ejecutiva de CivicAction, Leslie Woo, éste no es un problema menor, ya que dos tercios de los trabajadores de la salud, personal de primera respuesta, educadores y empleados del comercio minorista, están considerando mudarse y cambiar de trabajo.
La organización afirma que según sus últimos datos, el ingreso familiar promedio anual real en Toronto es de 100 mil dólares, sin embargo, esos mismos datos concluyen que para adquirir una vivienda promedio en esta ciudad, es necesario tener un ingreso anual de casi 235 mil dólares. Mucha gente viaja más de dos horas diarias para poder sobrevivir, dice.
CivicAction afirma que muchos trabajadores de Toronto no consiguen tener una vivienda en la ciudad y se han visto obligados a desplazarse cada vez más lejos y acceder a escuelas, guarderías infantiles e incluso servicios fundamentales se ha tornado muy difícil. Las familias más jóvenes están optando cada vez más por marcharse, se lee en el informe.
Pobreza invisible
La investigación de CivicAction, ha profundizado en los desafíos que enfrentan los trabajadores de ingresos medios en el Área Metropolitana de Toronto (GTA). Es un grupo de profesionales formado por maestros, enfermeras y otros trabajadores esenciales.
El nuevo informe concluye que muchos de ellos se están desplazando a otras regiones por causa de la actual crisis de la vivienda y que debido a las dificultades que enfrentan y a pesar de sus esfuerzos, se estarían convirtiendo en una suerte de “pobres invisibles”.
Según el informe, este concepto se justifica porque a pesar de que estos trabajadores tienen un empleo estable, muchas veces son ignorados porque su nivel de ingresos los ha empujado a la precariedad y se supone que se las “arreglan como pueden” para vivir.
Otro problema que enfrentan los que pertenecen a la clase media trabajadora, es que ganan más de lo que les posibilitaría acceder a las ayudas tradicionales de vivienda, señala el informe. Los responsables del estudio utilizan la clasificación de Estadísticas Canadá, que considera que son hogares de clase media los ganan entre 40 mil y 125 mil dólares al año.
Finalmente, el informe de CivicAction, recomienda que los empleadores ofrezcan programas de asistencia para la vivienda o iniciativas de vivienda para mantener la fuerza laboral.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporte