La historia detrás de Ke Huy Quan, la estrella infantil en dos de las películas más importantes de la década de 1980, pero que dejó de actuar cuando Hollywood se dio por vencido con él. Ahora ha tenido un regreso notable al ganar un Oscar el pasado fin de semana.
“Dicen que historias como esta solo ocurren en las películas”, dijo Quan entre lágrimas en los Oscar cuando recibió su premio al mejor actor de reparto en el drama de ciencia ficción Everything Everywhere All At Once. “No puedo creer que me esté pasando a mí. Este es el sueño americano” añadió el actor.
Cuando era niño, Quan se mudó de Vietnam a Hong Kong como refugiado y luego se instaló en los EE. UU.
Realmente, su estrellato a la fama lo consiguió en una audición por accidente para interpretar al carterista chino Short Round en Indiana Jones and the Temple of Doom de 1984, y luego interpretó al amante de los dispositivos Data en The Goonies al año siguiente.
Pero a medida que creció, los papeles se agotaron y se conformó con trabajos como asistente en dirección y detrás de escena.
Inspirado al ver Crazy Rich Asians, decidió intentar de nuevo y perseguir su sueño de actuar cuando se acercaba a los 50 años. Precisamente, un amigo agente accedió a representarlo, y dos semanas después, Quan recibió una llamada para “Everything Everywhere All at Once”, Esa película le proporcionaría su segunda gran oportunidad y su primer Premio de la Academia.
“Mi viaje comenzó en un barco. Pasé un año en un campo de refugiados y de alguna manera terminé aquí en el escenario más grande de Hollywood”. Afirmaba Quan mientras recordaba sus inicios en la actuación. Tenía siete años cuando salió de Vietnam en un bote estrecho a fines de la década de 1970 y desembarcó en Hong Kong con su padre mientras su madre y sus tres hermanos iban a Malasia.
Su vida iba a cambiar cuando fue a apoyar a su hermano menor en una audición para Indiana Jones a la edad de 12 años. Quan no tenía la intención de hacer la audición, pero el director de casting le sugirió que lo hiciera también y allí corrió con suerte, pues tres semanas después de dicha audición, se dirigía a Sri Lanka para comenzar a filmar la película. “Fue uno de los momentos más felices de mi vida”, sentenció.
En los Oscar, hubo un emotivo reencuentro con su ex coprotagonista de Indiana Jones, Harrison Ford, quien presentó el premio a la mejor película.
Finalmente, el actor vietnamita agradeció a su madre, hermano y esposa por el apoyo durante toda su vida y trayectoria, y además añadió: “Los sueños son algo en lo que tienes que creer. Casi me doy por vencido con los míos. A todos ustedes, por favor, mantengan vivos sus sueños” Sentenció Quan con su emotivo discurso durante la ceremonia de premiación.
Redacción de: Daniel Cetina