El gobierno de Haití ha extendido el estado de emergencia a todo el territorio nacional, según informó un portavoz del primer ministro Garry Conille. La medida busca enfrentar la creciente violencia de las pandillas que controlan gran parte de la capital, Puerto Príncipe, y están expandiendo su influencia hacia otras regiones del país.
El estado de emergencia se instauró inicialmente en marzo bajo la administración del anterior primer ministro, Ariel Henry. Esto ocurrió tras un aumento dramático de la violencia y dos fugas masivas de prisioneros. Posteriormente, la emergencia se extendió a otros departamentos, como la región agrícola de Artibonite, y las áreas del Centro y Nippes, en el sur del país.
Declaraciones oficiales
El primer ministro Conille declaró que su gobierno ha distribuido materiales y armas al ejército haitiano y a la policía nacional en un esfuerzo por recuperar territorios controlados por las pandillas. Este anuncio llega un día antes de la visita planificada del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, a Haití.
Apoyo internacional
Estados Unidos, que ha sido el principal financiador de una misión de seguridad respaldada por la ONU en Haití, continúa apoyando los esfuerzos del gobierno para recuperar el control del país. La misión, solicitada por Henry en 2022, busca combatir a las pandillas y estabilizar la nación, pero enfrenta desafíos logísticos y de personal.
En junio y julio de este año, llegaron los primeros 400 agentes de policía desde Kenia como parte de esta misión. Sin embargo, aunque otros países han prometido enviar al menos 2.500 efectivos adicionales, estos aún no han arribado. El mandato de la misión expirará a principios de octubre, lo que añade presión para resolver la crisis.
La violencia ha dejado a casi 580.000 personas desplazadas internamente y ha exacerbado la crisis humanitaria en el país, donde cientos de miles de haitianos han sido deportados y alrededor de 5 millones de personas se enfrentan a una hambruna severa.
Redacción de: Karen Rodríguez A.
