Cientos de miles de jóvenes de todo el mundo que ondeaban banderas le dieron al papa Francisco una estridente bienvenida al festival de la Jornada Mundial de la Juventud en la capital de Portugal este jueves, en una señal de apoyo juvenil al pontífice de 86 años y sus llamados a la inclusión y la justicia económica.
En una muestra de entusiasmo que no se había visto desde los primeros años del papado de Francisco, que ya tiene una década, adolescentes y adultos jóvenes llenaron un parque del centro de Lisboa para la ceremonia de apertura católica. Los peregrinos corrían a su lado mientras su papamóvil daba vueltas entre la multitud y un sonriente Francisco disfrutaba de sus ovaciones.
Los organizadores estimaron que unos 500.000 peregrinos asistieron a la ceremonia inaugural de la Jornada Mundial de la Juventud en el parque Eduardo VII de Lisboa, una cifra que se esperaba que se duplicara con creces durante los próximos días del festival.
El Papa, que fue hospitalizado dos veces este año, había dicho que esperaba estar “rejuvenecido” con su viaje de cinco días a Portugal. Durante su intervención, enfatizó su llamado a que la Iglesia católica sea acogedora para todos, incluidos los pecadores. “Hay lugar para todos en la iglesia”, dijo Francisco a la multitud.
Redacción de: Karen Rodríguez
