La Corte Suprema de Canadá aceptó revisar una decisión judicial que concluyó que Facebook, actualmente Meta Platforms, violó la ley federal de privacidad al no informar adecuadamente a los usuarios sobre los riesgos relacionados con el uso de sus datos personales en la red social. El caso se centra en el cumplimiento de la Ley de Protección de Información Personal y Documentos Electrónicos entre 2013 y 2015.
La decisión que ahora será revisada fue emitida en septiembre por el Tribunal Federal de Apelaciones, que revocó un fallo anterior del Tribunal Federal de 2023. Según el Tribunal de Apelaciones, Facebook permitió el acceso a su plataforma a millones de aplicaciones sin una supervisión efectiva, y no obtuvo el consentimiento significativo requerido por la ley de privacidad canadiense. Además, consideró que el tribunal inferior incurrió en un error legal al omitir el análisis de pruebas relevantes.
La investigación inicial sobre el manejo de datos de Facebook surgió tras el escándalo de Cambridge Analytica. En 2019, el entonces comisionado de privacidad Daniel Therrien y su homólogo de Columbia Británica concluyeron que la red social permitió que una aplicación, presentada como un test de personalidad, accediera a la información no solo de los usuarios que la descargaban, sino también de sus contactos. Esa información, según los comisionados, fue transmitida a terceros, incluida la consultora británica Cambridge Analytica, que usó los datos en campañas políticas, entre ellas las elecciones estadounidenses de 2016.
Se estima que alrededor de 300.000 usuarios de Facebook instalaron la aplicación, lo que resultó en la posible exposición de información personal de hasta 87 millones de personas, incluidos más de 600.000 canadienses.
El comisionado de privacidad actual, Philippe Dufresne, calificó el fallo del Tribunal de Apelaciones como una afirmación de que las empresas globales basadas en datos deben respetar la legislación canadiense. Facebook, por su parte, presentó una solicitud ante la Corte Suprema argumentando que el tribunal anterior aplicó incorrectamente los conceptos de consentimiento y protección bajo la ley. Sostuvo que el análisis se enfocó exclusivamente en su política de privacidad, sin considerar los múltiples mecanismos implementados para obtener el consentimiento de los usuarios.
El juez Donald Rennie, quien redactó la decisión del Tribunal de Apelaciones, cuestionó la suposición de que los usuarios leen y comprenden las políticas de privacidad, dado que muchas veces se trata de documentos largos y complejos. Añadió que la claridad superficial de los términos no garantiza un consentimiento informado y significativo.
Aunque la Corte Suprema no explicó sus motivos para aceptar el caso, como es habitual, su revisión podría sentar un precedente importante en la interpretación y aplicación de las leyes de privacidad en la era digital. El fallo también podría tener implicaciones más amplias sobre cómo las empresas tecnológicas deben garantizar el consentimiento de los usuarios y proteger sus datos en Canadá.
Redacción de: Karen Rodríguez A.