Nian, el monstruo del Año nuevo que ataca a todas las poblaciones de las aldeas del continente asiático, inaugura su llegada este 22 de enero en todo el mundo. La historia de la celebración de este Año Nuevo chino remonta a la leyenda de este monstruo (que se traduce ‘Año’) que llega cada inicio de año. Se narra que Nian le teme a los ruidos fuertes y a los colores brillantes como el rojo, por lo que las aldeas, cada inicio de año, tinturaban y celebraban con grandes bombones rojos por toda la aldea para ahuyentar al monstruo.
En 2023 se despide al año del tigre de agua y se da la bienvenida al año del conejo de agua.
En realidad, este no es su nombre oficial: en China, las festividades son conocidas como Festival de Primavera o Año Nuevo Lunar. Precisamente, comienzan con la segunda luna después del solsticio de invierno, una fecha que puede ir desde finales de enero hasta mediados de febrero en el calendario gregoriano (el que finaliza el año el 31 de diciembre).
Las celebraciones del Año Nuevo Chino empiezan en el primer día del primer mes lunar en el calendario chino y se extienden por 15 jornadas, cuando llega la luna llena.
Su celebración está llena de supersticiones acogidas de la cultura oriental. Cada uno de los 15 días que componen la celebración tiene sus propias tradiciones. En la víspera del Año Nuevo Chino, por ejemplo, las familias se reúnen para cenar juntas.
También está la costumbre de quedarse en casa para recibir la buena fortuna o visitar a los suegros. Además, se entrega dinero en un sobre de color rojo, llamado “hong bao” a niños y adultos sin pareja. En los últimos años, el regalo ha migrado hacia lo digital, según asegura CNN.
La tradición de lanzar fuegos artificiales proviene de la costumbre de encender tallos de bambú para alejar a los malos espíritus, como la monstruo mitad dragón, mitad león, Nian.
Si bien la mayoría de los países y territorios que celebran explícitamente el Año Nuevo chino se encuentran en Asia, existen excepciones. En Surinam, el cambio de año tanto en el calendario gregoriano como en el lunar son días festivos. Según el censo oficial, alrededor de 7% de los cerca de 618.000 habitantes son descendientes de chinos.
