La oficina de la ministra de Cuidados a Largo Plazo de Ontario, Natalia Bashta, confirmó que 424 pacientes han sido trasladados a residencias de cuidados a largo plazo. Desde que la ley de traslados entró en vigencia a finales de 2022, alrededor de 20,300 pacientes fueron dados de alta de los hospitales de la provincia y encaminados a hogares de ancianos.
Dicha ley fue creada para los pacientes del denominado nivel alternativo de atención, ellos son dados de alta, sin embargo, necesitan una cama de atención a largo plazo. Por esta ley, los hospitales pueden envíar a estos adultos mayores a residencias que no escojan hasta 70 kilómetros de distancia o hasta 150 kilómetros de distancia en el norte de la provincia.
Los pacientes tienen que buscar su propio espacio, si no lo consiguen tienen que ceñirse a la ley y se niegan, los hospitales podrían cobrarles 400 dólares diarios. En esta ocasión fueron 424, no obstante, lo que preocupa es que el ritmo de esos traslados está aumentando, causando temor en muchos de ellos, que se sienten inseguros lejos de sus seres queridos.
Qué dicen los críticos
La mayoría de los activistas por un mejor trato de los pacientes, critica la ley y la forma como viene aplicándose. Afirman que muchas personas no sólo se preocupan con el distanciamiento de sus familiares, sino que se sienten bastante amenazadas con la posibilidad de pagar enormes tarifas y que muchas veces no tienen los recursos.
Afirmaron, que las personas que han pagado dichas multas se quejan de haberse quedado sin dinero para otros gastos necesarios. Otras simplemente, se han negado a pagar por considerar abusivos los valores cobrados por los hospitales, en un caso, la cuenta que le llegó al paciente, alcanzaba el valor de 26 mil dólares, es impagable, dijo el aludido.
Qué argumenta el gobierno
El gobierno de Ontario, tras vencer de manera contundente las elecciones de 2022, presentó el Proyecto de Ley 7 en el verano de ese año. Según el premier Doug Ford, fue un esfuerzo por abrir espacios absolutamente necesarios en los hospitales ya que muchos pacientes no tomaban conciencia de la necesidad de abandonar los hospitales para casos urgentes.
Sin embargo, cuando aprobaron la ley en pocos días, haciendo uso de su mayoría calificada y sin pasar por un estudio en el comité correspondiente, se oyeron voces de protesta, por parte de la oposición política, así como de los colectivos de las personas mayores, acusándolos de que en su improvisación, acabaron perjudicando a muchos pacientes.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporte