Un violento ataque perpetrado por yihadistas vinculados a Al Qaeda en la comuna de Barsalogho, en el centro de Burkina Faso, ha dejado un saldo de al menos 100 muertos, incluidos aldeanos y soldados, según informes de expertos regionales. Este ataque es considerado uno de los más mortíferos de 2024 en el país, que ha sido golpeado por el conflicto yihadista en los últimos años.
El ataque ocurrió el sábado cuando habitantes de la zona, ubicada a unos 80 kilómetros de la capital, Uagadugú, colaboraban con las fuerzas de seguridad en la excavación de trincheras para defender las aldeas y puestos de seguridad. Combatientes del grupo Jama’at Nasr al-Islam wal Muslimin (JNIM), vinculado a Al Qaeda, irrumpieron en el área y abrieron fuego, según Wassim Nasr, especialista en la región del Sahel y miembro del Soufan Centre. Nasr informó que, basándose en videos del ataque, se contabilizan al menos 100 cadáveres.
En un comunicado, Al Qaeda se atribuyó la responsabilidad del ataque, afirmando que tomó “el control total de una posición de la milicia” en Barsalogho, en la estratégica región de Kaya. Las fuerzas de seguridad han estado luchando para repeler a los yihadistas, que buscan expandir su influencia hacia la capital.
El ministro de Seguridad de Burkina Faso, Mahamadou Sana, confirmó el ataque y señaló que el gobierno respondió con apoyo terrestre y aéreo. Aunque no especificó el número exacto de víctimas, Sana subrayó que entre los muertos se encuentran tanto soldados como civiles. “No vamos a aceptar semejante barbarie en el territorio”, afirmó el ministro en un mensaje transmitido por la televisión estatal. También aseguró que el gobierno ha enviado asistencia médica y humanitaria a los afectados y reafirmó su compromiso de proteger a la población.
Creciente inseguridad en Burkina Faso
Burkina Faso ha estado sumido en una creciente ola de violencia yihadista desde 2015, lo que ha llevado a que aproximadamente la mitad del país esté fuera del control del gobierno. Los ataques de grupos yihadistas vinculados tanto a Al Qaeda como al Estado Islámico han provocado miles de muertes y han desplazado a más de dos millones de personas. La situación de inseguridad ha sido un factor clave en los dos golpes de Estado que sacudieron al país en 2022.
El conflicto en Burkina Faso se ha intensificado debido a la falta de una cobertura aérea y de inteligencia eficiente por parte de las fuerzas de seguridad, así como al control ineficaz de las zonas fronterizas con Mali y Níger, dos países vecinos que también sufren ataques violentos.
Burkina Faso sigue enfrentándose a una situación de extrema inseguridad, y la violencia continúa amenazando la estabilidad del país y la vida de millones de personas.
Redacción de: Karen Rodríguez A.
