Las autoridades mexicanas informaron el miércoles que el número de incendios forestales en el país ha aumentado a 120, impactando a una veintena de áreas naturales protegidas y ocasionando perjuicios en más de 7.000 hectáreas debido a una intensa sequía.
La Comisión Nacional Forestal (Conafor) señaló que la cantidad de incendios activos ha crecido significativamente en comparación con el día anterior, cuando se reportaron 95 focos. Estos incendios han afectado a 19 de los 32 estados del país, expandiéndose en más del doble en las últimas 24 horas y cubriendo una superficie de 7.137 hectáreas.
El presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó la pérdida de vidas humanas, incluyendo a un policía, un brigadista forestal y dos comuneros. En el estado central de México, tres guardabosques perdieron la vida la semana pasada mientras intentaban controlar las llamas en un cerro en la comunidad de San Lucas Texcaltitlán.
¿Qué están haciendo las autoridades?
Para hacer frente a la emergencia, alrededor de 6.000 miembros de los cuerpos de rescate, el Ejército, la Armada y Protección Civil, respaldados por cuatro helicópteros, están trabajando arduamente para contener los incendios. Las regiones más afectadas incluyen el Estado de México y Veracruz, en el centro y sureste del país.
En Veracruz, la Secretaría de Protección Civil informó que aproximadamente 1.600 hectáreas han sido afectadas y lamentó la muerte de cinco brigadistas y un policía en la lucha contra el fuego. El estado de Veracruz ha sido uno de los más golpeados por estos incendios, con al menos 620 hectáreas afectadas.
La ola de incendios forestales ha surgido en medio de una severa sequía que ha azotado varias regiones mexicanas. En algunas áreas, como la región de Jilotzingo, los vecinos tuvieron que organizarse para combatir las llamas debido a la falta de ayuda profesional de servicios de bomberos, mientras que, en otros lugares, las condiciones climáticas adversas han dificultado los esfuerzos de contención.
Las autoridades continúan monitoreando la situación y trabajando para controlar los incendios, mientras que la población local se moviliza para proteger sus comunidades y entornos naturales.
Redacción de: Karen Rodríguez A.