Los supervivientes de un terremoto que arrasó aldeas en las montañas del noroeste de Nepal buscaban el lunes entre los escombros de sus casas derrumbadas pertenencias recuperables mientras la ayuda llegaba a la zona remota.
El temblor relativamente poco profundo de magnitud 5,6 del viernes mató a 157 personas, hirió a decenas y dejó a miles sin hogar cuando se produjo poco antes de la medianoche, provocando deslizamientos de tierra y derrumbes de viviendas en una zona de pendientes pronunciadas centrada alrededor del distrito de Jajarkot. El distrito está a unos 400 kilómetros (250 metros) al noreste de la capital, Katmandú.
Las autoridades continuaron hasta el lunes con sus esfuerzos para llevar alimentos, tiendas de campaña, medicinas y otros suministros a las aldeas remotas, a muchas de las cuales sólo se puede llegar a pie debido que las carreteras también quedaron bloqueadas por los deslizamientos de tierra provocados por el terremoto. Soldados intentando despejar las carreteras bloqueadas mientras que los equipos de rescate y búsqueda dijeron que la primera parte de su misión (rescatar a los sobrevivientes, llevar a los heridos a tratamiento y buscar cadáveres) había terminado. Más tarde, el suelo volvió a temblar con una réplica de magnitud 5,3 que hizo que la gente corriera hacia un lugar seguro.
El Centro Nacional de Operaciones de Emergencia de Nepal en Katmandú dijo que, además de los 157 muertos, al menos 256 personas resultaron heridas y 3.891 casas sufrieron daños.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, que acaba de regresar de un viaje a Nepal, dijo que la hospitalidad y el espíritu del pueblo del país estaban “frescos en su corazón”. Envió sus condolencias a las familias de las víctimas y deseó una rápida recuperación de los heridos, según comunicó el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric. “Las Naciones Unidas están trabajando estrechamente con las autoridades para proporcionar asistencia rápida, incluidos alimentos, alojamiento y medicinas, a los afectados”, añadió el portavoz.
El terremoto del viernes por la noche también se sintió en la capital de la India, Nueva Delhi, a más de 800 kilómetros (500 millas) de distancia.
Los terremotos son comunes en el montañoso Nepal. Un terremoto de magnitud 7,8 en 2015 mató a unas 9.000 personas y dañó alrededor de un millón de estructuras.
Redacción de: Karen Rodríguez