Un convoy de pasajeros colisionó con uno de mercancías en la ruta entre Atenas y Resolónica. Los sindicatos denuncian el deterioro de la red ferroviaria.
Al menos 36 personas murieron y decenas resultaron heridas al chocar dos trenes cerca de la ciudad griega de Larisa, centro de Grecia. Se ha considerado el peor accidente ferroviario en la historia de Grecia. El accidente se produjo cuando un convoy de pasajeros colisionó con uno de mercancías, según indica el servicio de bomberos de Grecia. De acuerdo a informes preliminares, el tren de pasajeros se había desviado a un carril equivocado, mismo carril en el que viajaba el tren de carga. Se habla de que era un total de 346 pasajeros y 20 tripulantes los viajaban en los trenes.
El accidente se produjo antes de la medianoche local entre los municipios de Tempe y Evangelismos, en un valle cerca de Larisa, a 300 kilómetros al norte de Atenas. “Es una tragedia impensable. Nuestros pensamientos están hoy con los familiares de las víctimas”, ha dicho el primer ministro del país, Kyriakos Mitsotakis desde el lugar del accidente. “Una cosa puedo garantizar, vamos a averiguar las causa de esta tragedia y a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para que nunca vuelva a suceder “, sentenció.
El país se ha declarado en 3 días de luto, con la bandera a media asta en todos y cada uno de los edificios públicos y también la suspensión de las celebraciones públicas. De acuerdo con la policía, las llamas de humo rodeaban cuatro vagones del tren de pasajeros. El alcalde de Tempe, Giorgos Manoli, ha asegurado que en los tres primeros vagones se han registrado temperaturas de hasta 1.500 grados centígrados.
Varios sindicatos ferroviarios y trabajadores del sector han señalado la falta de medios como posible razón del accidente. El presidente del sindicato de maquinistas, Kostas Genidouias, culpó a la falta de mantenimiento y ausencia de sistemas automáticos de prevención. “Nada funciona. Ni los intermitentes, ni los semáforos, ni el control de tráfico. Si lo hicieran, los conductores verían los semáforos en rojo y se detendrían a tiempo. Nos hemos hartado de decirlo”, afirmó de manera indignada.
Entre los heridos hay varios menores de edad. Según la prensa local, ambos trenes iban a gran velocidad en el momento del impacto, razón por la cual muchos de los pasajeros murieron de manera inmediata en el accidente. Aproximadamente, unas 250 personas que sobrevivieron y resultaron ilesas o con heridas leves fueron trasladadas en autobuses hacia Tesalónica.
Redacción de: Daniel Cetina