Un tribunal especial en la prisión de la ciudad de Rawalpindi condenó el martes al ex primer ministro Imran Khan y a uno de los diputados de su partido, Shah Mahmood Qureshi, a 10 años de prisión cada uno. Ambos fueron declarados culpables de revelar secretos oficiales en el caso conocido popularmente como “Cipher”.
Este veredicto representa un revés para Khan, la ex estrella del cricket convertida en político islamista, quien fue derrocado mediante un voto de censura en el Parlamento en abril de 2022 y actualmente cumple una condena de tres años por corrupción.
El fallo se anunció en medio de críticas rápidas por parte de los seguidores de Khan, quienes insisten en que los casos legales en su contra son un complot para marginarlo antes de las elecciones parlamentarias del 8 de febrero. Aunque Khan no puede participar en las elecciones debido a su condena penal, sigue siendo una fuerza política potente gracias a sus seguidores de base y su retórica antisistema.
QUÉ PASÓ CON KHAN
El caso Cipher, uno de los más de 150 casos contra Khan, se centra en la acusación de que agitó un documento confidencial en una manifestación después de su derrocamiento. Según fuentes, el documento sería un cable clasificado de correspondencia diplomática entre el embajador de Pakistán en Washington y el Ministerio de Asuntos Exteriores en Islamabad.
Durante el juicio, Khan afirmó que el documento era evidencia de una conspiración estadounidense para derrocarlo, supuestamente ejecutada por el ejército y el gobierno de Pakistán. Tanto Washington como funcionarios paquistaníes negaron estas acusaciones.
QUÉ VIENE DESPUÉS
El partido Pakistán Tehreek-e-Insaf (PTI) de Khan anunció que apelará la condena ante el Tribunal Superior de Islamabad el miércoles. A pesar de la condena, el PTI llamó a la calma entre sus seguidores y pidió que canalizaran sus energías hacia las elecciones del 8 de febrero.
Las tensiones políticas en Pakistán se han intensificado desde el arresto de Khan en mayo de 2023, y la Comisión de Derechos Humanos expresó preocupaciones sobre la posibilidad de elecciones justas debido a la “manipulación previa a las elecciones”. Mientras tanto, el partido de Khan mantiene su lucha por un Pakistán democrático y el respeto a la ley y la constitución.
Redacción de: Karen Rodríguez A.
