La escena -que se desarrolló en menos de un minuto- se transformó rápidamente en uno de los momentos más tensos y seguramente más grabados de la 94ª ceremonia de los Oscar.
El gesto de exasperación de Jada Pinkett Smith lo dice todo: la broma de Chris Rock por su alopecia -una condición que causa la pérdida de cabello y sobre la que ella ha hablado con franqueza en el pasado- no le hizo la menor gracia.
Acto seguido, y tras esbozar una sonrisa que ahora vemos como probablemente incómoda, su marido, Will Smith, se subió al escenario y le dio una bofetada a Rock. Luego volvió a su asiento y exclamó a voz en cuello: “Mantén el nombre de mi esposa fuera de tu maldita boca”.
Los comentarios sobre este acto condenan en su mayoría el gesto violento de Smith.
“La violencia no está bien. El asalto nunca es la respuesta”, tuiteó la actriz estadounidense Sophia Bush.
“Esta es la segunda vez que Chris se burla de Jada en el escenario de los Oscar y esta noche fue por su alopecia. Darle un golpe a la enfermedad autoinmune de alguien está mal. Hacerlo a propósito es cruel. Ambos necesitan un respiro”.
Algunos medios van más allá e intentan entender las razones detrás de su comportamiento.
El periódico británico The Guardian, por ejemplo, se apoya en “Will”, la autobiografía de Smithpublicada en 2021 en la que el actor detalla los brutales abusos que su padre infligía a su madre y de los cuales él fue testigo, para establecer un vínculo entre sus vivencias de niño y su conducta actual.
“Cuando tenía 9 años, vi a mi padre golpeó a mi madre en un lado de la cabeza con tanta fuerza que ella colapsó”, escribió Smith.
“La vi escupir sangre. Ese momento en esa habitación, probablemente más que cualquier otro momento en mi vida, ha quién definido soy”.
No solo fue la violencia lo que lo dejó traumatizado, explicaba Smith en tu libro, sino su propia falta de acción frente a ello.
“Dentro de todo lo que he hecho desde entonces, los premios y elogios, los focos y la atención, los personajes y las risas, ha habido una serie sutil de disculpas a mi madre por mi inacción ese día. Por fallarle en el momento. Por no hacerle frente a mi padre, por ser un cobarde”, escribió.
Y aunque sin hacer referencia directa, Smith intentó explicar su accionar más tarde cuando hubo lágrimas el premio a mejor actor por su papel en King Richard, donde interpreta al padre de las tenistas Venus y Serena Williams.
“Sé que para hacer lo que hacemos tienes que ser capaz de soportar el abuso, y que la gente dice cosas locas sobre ti y que la gente te falte al respeto, y tienes que sonreír y fingir que está bien. Pero el amor te hace hacer cosas locas”, dijo entre lágrimas.