El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, afirmó que una parte importante de la población mundial enfrentará una ola de hambre y miseria, lo que podrá general una convulsión social sin precedentes.
Guterres aseveró, que los precios de los alimentos están alcanzando valores extremamente elevados y que es muy probable que haya escasez de productos alimenticios, debido a la falta de fertilizantes para los cultivos.
Según el titular de Naciones Unidas, tras tres meses del conflicto en Ucrania el mundo enfrenta una posibilidad concreta de que la guerra en el este europeo provoque una ola de hambre y miseria a nivel global, jamás vista.
Estas afirmaciones fueron hechas por António Guterres, durante la presentación del segundo informe del Grupo de Respuesta a la Crisis Mundial, que estudió los efectos de la guerra de Ucrania y concluyó que ningún país saldrá indemne de esta crisis.
Datos del Programa Mundial de Alimentos, mencionados por el titular de la ONU, corroboran que los efectos del conflicto podrían generar un estado de inseguridad alimentaria grave para más de 47 millones de personas este año 2022.
Se habló también, de que la crítica situación por la que atraviesa el planeta ha generado un aumento en los precios de la electricidad, lo cual provoca apagones y escasez de combustibles, especialmente en regiones con dificultades, como África.
Entre las consecuencias de la crisis, mencionó que en el ámbito laboral, tres de cada cinco trabajadores reciben un salario menor que antes de la pandemia. Esta situación no permite a las personas organizar debidamente sus presupuestos.
Muchas familias se han visto obligadas a cerrar sus negocios, vender su ganado o retirar a sus hijos de la escuela. Esta situación, perjudica mayormente a las mujeres y niñas, quienes acaban siendo las últimas en comer y las primeras en dejar de hacerlo a medida que escala la escasez de los alimentos, finalizó António Guterres.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter