Un estudio elaborado por el Banco Royal de Canadá, revela que los canadienses están cada vez más cuidadosos a la hora de realizar sus compras. Los responsables por la investigación concluyeron que en agosto el gasto del consumo per cápita, disminuyó.
Ni siquiera la expectativa de que el retorno a clases incentivara el consumo se concretó. En agosto, las ventas minoristas básicas (excluyendo el gasto en vehículos y gasolina) se incrementaron apenas un 0,4 por ciento y el gasto total disminuyó en 2,2 por ciento. Las ventas minoristas básicas fueron más débiles que en julio, que alcanzaron el 1,1 por ciento.
Asimismo, el informe de esa institución financiera asevera que la mayoría de las categorías principales de gastos registraron un crecimiento, de hecho un poco más lento. El sector que tuvo una aceleración mayor fue el del vestuario y la adquisición de ropas.
Por otro lado, los gastos en viajes disminuyeron en un 0,1 por ciento ajustado estacionalmente, en un promedio trimestral, asegura la economista Rachel Battaglia, una de los responsables del estudio del Banco Royal de Canadá.
Otras conclusiones de la investigación
El estudio muestra también, que un factor clave en esta tendencia ha sido la contracción continua del gasto en gasolina, que se mantiene en un promedio trimestral desde la eliminación esta primavera, del impuesto al carbono al consumidor.
En relación al uso de tarjetas de crédito, otro informe elaborado por la firma de análisis de datos J.D. Power and Associates, muestra que también se ha registrado una disminución en los gastos de los canadienses por este medio.
Los datos de esa investigación revelan que en los últimos dos años, los gastos mensuales con tarjetas de crédito han disminuido un 17 por ciento, llegando a los 1,336 dólares. Esta caída, no se limita al uso de tarjetas de crédito, expresaron.
También sus gastos con las tarjetas de débito y en efectivo vienen disminuyendo desde el año 2023 reveló el estudio, basado en las informaciones de los titulares de dichas tarjetas.
Cautela necesaria
El estudio del equipo de especialistas del Banco Royal de Canadá, concluye su informe reportando que esta tendencia coincide con sus perspectivas económicas generales.
Los responsables de la investigación consideran que la economía canadiense tendrá un lento crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB), pero positivo, tras la caída registrada en el segundo trimestre, con un gasto del consumidor relativamente resiliente que podrá compensar las persistentes dificultades del sector industrial nacional.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporte
