La economía estadounidense se contrajo en los últimos tres meses un 0,9%.
Este es el segundo trimestre consecutivo en el que la economía se ha contraído. En el primer trimestre, el PIB, o producto interno bruto, tendrá una tasa anual de 1,6%.
Si bien dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo a menudo se considera una recesión, no es una definición oficial. Una organización no partidista y sin multas de lucro llamada Oficina Nacional de Investigación Económica determina cuándo la economía estadounidense está en recesión. Un comité de NBER compuesto por ocho economistas toma esa determinación y muchos factores intervienen en ese cálculo.
La Casa Blanca ha rechazado llamar a la economía actual una recesión. Sin duda es consciente del papel que va a desempeñar la economía en las elecciones intermedias.
El presidente Biden citó el crecimiento del empleo y la inversión de empresas extranjeras como signos de fortaleza en la economía. “Eso no me parece una recesión”, concluyó Biden.