La agencia federal Estadísticas Canadá, informó el martes, que por primera vez en casi un año, registró una inflación de los alimentos durante el mes de mayo. Es verdad que el aumento ha sido modesto, no obstante, se suma a los ya elevados precios de los comestibles, dijo la agencia en su informe.
Según la agencia pública, los precios han aumentado desde mayo de 2020, un 22,5 por ciento. En el mes de mayo, el incremento de los precios de los alimentos fue del 1,5 por ciento, ligeramente mayor que el aumento registrado en el mes precedente, que alcanzó el 1,4 por ciento. La agencia registró la primera aceleración desde junio de 2023.
Contenido
Qué productos contribuyeron a ese aumento
Estadísticas Canadá, dice que sobre una base mensual, el crecimiento de mayo fue impulsado por los mayores precios de las verduras frescas, que costaron ese mes un 3,5 por ciento más. La carne aumentó un 1,3 por ciento, la fruta fresca costó un 2,2 por ciento más, y los productos no alimentarios como las bebidas alcohólicas subieron un 2,4 por ciento.
La agencia pública indagó las razones del incremento de los precios de los diversos alimentos, los motivos son variados, en el caso de la carne, -alimento importante en la dieta del canadiense- el aumento mensual se debió en gran medida al aumento de los precios de la carne vacuna fresca o congelada en medio a una gran demanda y a una escasa oferta.
Consecuencias del incremento de los precios de los alimentos
De acuerdo con la analista de RBC Capital Markets, Irene Nattel, ese incremento del 22,5 por ciento en los precios de los comestibles desde mayo de 2020 representa una gigantesca dificultad para los presupuestos familiares, lo que probablemente conlleva a diferentes comportamientos, como la búsqueda de mejores precios por parte de los canadienses.
Por otro lado, un estudio elaborado por Lightspeed Commerce Inc., mostró que el aumento de los precios de los alimentos está afectando algunos hábitos de los canadienses durante sus salidas a cenar, muchos buscan restaurantes más accesibles, algunos pasaron a dejar menos propinas y otros prefieren buscar ofertas especiales de happy hour.
Según la encuesta, el 70 por ciento de los comensales respondió haber notado que los precios en los restaurantes han estado más elevados durante el último año, un 40 por ciento notó que sus platos favoritos los están sirviendo más pequeños, lo que se conoce como “contracción inflada”. No obstante, un 44 por ciento de los entrevistados afirma que a pesar de los incrementos en los precios, continuarán saliendo a cenar en los restaurantes.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporte
