Canadá ha sancionado a Rusia. Ha prohibido la entrada de vuelos rusos al país. El primer ministro Justin Trudeau les dijo a los ucranianos esta semana, en el día de su independencia: “No están solos. Los canadienses están con ustedes”.
No obstante, Canadá no ha dado el paso que ahora pide el gobierno ucraniano. No ha cerrado sus fronteras a los rusos, al menos no del todo.
Ottawa ha emitido miles de visas a ciudadanos de Rusia desde que el ejército de ese país invadió Ucrania el 24 de febrero, según cifras obtenidas por el Star.
Se han emitido 3560 visas a ciudadanos rusos entre el 24 de febrero, el día de la invasión rusa, y el 30 de junio. Entre ellos, 130 permisos de estudiante, 2377 permisos de residencia temporal y 1053 permisos de trabajo.
Las visas de residencia temporal se otorgan a los ciudadanos rusos que viajan a Canadá por un período de tiempo limitado: una categoría amplia que puede aplicarse a los miembros de la familia que visitan, a los que estudian en universidades canadienses, a los que vienen por viajes de negocios, así como a los que vienen por un simple vacaciones.
La instantánea de los números de visa se produce en medio de un creciente impulso del gobierno ucraniano y las naciones de Europa del Este para aumentar la presión sobre el régimen de Putin prohibiendo a los ciudadanos rusos viajar al extranjero en cualquier circunstancia excepto en las más urgentes, como buscar protección contra la persecución.