Estudiantes de la Universidad de Toronto, así como de varias universidades canadienses y alrededor del mundo, han ocupado el KIng’s College Circle el pasado dos de mayo, como una forma de protesta en apoyo al pueblo palestino, tras los ataques del gobierno israelí.
Como respuesta, las autoridades de la universidad han solicitado una orden judicial para despejar el campamento a través de una acción policial. La idea es que se retire y arreste a los estudiantes, así como sus pertenencias y la estructura que han montado.
El presidente de la universidad, Meric Gertler, informó que han intentado negociar una salida pacífica con los estudiantes, reuniéndose varias veces con los líderes del movimiento. Sin embargo, debido al fracaso de los diálogos, se ha visto obligado a recurrir a la justicia.
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Qué argumentan los funcionarios de la universidad
Para las autoridades universitarias, la ocupación del campus del centro está causando daños irreparables a la institución. Arguyen además, que los manifestantes están bloqueando el acceso a la universidad con sus tiendas de campaña, vallas y otras estructuras.
Afirmaron asimismo, que están preocupadas con la salud y la seguridad no sólo de los estudiantes, sino también de los miembros de la comunidad universitaria y del público. Dijeron que la presencia de hogueras encendidas en el campamento, podría ser peligrosa.
Qué responden los manifestantes
Los estudiantes entienden que tienen el derecho de expresar todo su repudio a lo que está sucediendo en la Franja de Gaza y que no abandonarán el campus porque se supone que los recintos universitarios son los espacios de libertad de pensamiento y de manifestación.
Dijeron también, que están preparados para contraatacar con su propio equipo legal. Por otro lado, cuentan con el apoyo de los sindicatos, entre ellos, la Federación Laboral de Ontario, que argumentará ante los tribunales a favor de los campamentos.
Qué dicen las autoridades de Ontario
La ministra de Colegios y Universidades, Jill Dunlop, considera que las autoridades universitarias deberían haberse anticipado a los hechos, ahora espera que todo se resuelva lo antes posible y que el funcionamiento de la universidad vuelva a la normalidad.
Por su parte, Marit Stiles, líder del NDP y de la oposición oficial de Ontario, declaró que la manifestación es pacífica y que los estudiantes tienen todo el derecho a protestar, la universidad debe continuar negociando con los estudiantes y no apelar a los tribunales para conseguir una orden judicial, que sólo provocaría violencia durante su ejecución, ponderó.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporte